Sigmund Freud, por Salvador Dalí

Se acabaron las grandes mariposas: 150 años del nacimiento de Freud


El 6 de mayo próximo se celebra el 150 aniversario del nacimiento de Sigmund Freud, el padre del psicoanálisis. La Deutsche Welle publicó una nota sobre los 150 años y con el correr de las semanas, a medida que nos acerquemos a la fecha, van a ir apareciendo en los medios decenas de publicaciones al respecto. Dejamos a los que saben que hablen de Freud, porque cuando leímos la nota de la Deutsche Welle se nos vino a la mente un libro sensacional de Salvador Dalí: Diario de un genio.

Se trata de un librito que recomendamos, y en el que Dalí habla -en las notas del 11 de mayo de 1957- del retrato que hizo en presencia de Freud. Un dibujo al carbón realizado en 1938, en Londres, un año antes de la muerte del autor de La interpretación de los sueños.



Escribe Dalí:


Dije ya, al narrar mi encuentro con él, que el cráneo de Freud parecía un Caracol de Borgoña. La consecuencia es obvia: si se quiere digerir su pensamiento hay que extraerlo con un palillo. De lo contrario se rompe y no hay nada que hacer; jamás llegaras a desentrañarlo.

El pintor de El enigma sin fin -cuadro que vimos en hace unos años en el Museo de Bellas Artes de Buenos Aires- luego se extiende sobre por qué Freud era un "mítico al revés", sobre por qué su cerebro, al invertirlo, se asemejaría a "la gloriosa Asunción pintada por el Greco", y reflexiona:


Al parecer, sin darme cuenta, dibuje la muerte terrestre de Freud en el retrato al carbón que hice de él un año antes de su muerte. Mi intención especial había sido realizar un dibujo puramente morfológico del genio del psicoanálisis.


Según dijo Stefan Zweig -quien los había presentado- a Freud le "había gustado mucho" el retrato, había apreciado la "delicadeza de los rasgos".


Termina Dalí sus notas sobre Freud: "¡Se acabaron las grandes mariposas!"